Ictus o Accidente Cerebro-vascular
El Ictus consiste en la pérdida de funciones del sistema nervioso central, porque el cerebro u otras estructuras nerviosas intracraneales se quedan sin aporte sanguíneo de forma temporal o de manera definitiva.
El Ictus es también conocido con el nombre de Accidente Cerebro Vascular.
Si la falta de aporte sanguíneo es temporal se llama Ictus Transitorio.
Esta falta de riego en general puede ser por dos causas fundamentales.
Por un lado, que se Rompa un vaso sanguíneo cerebral, o un aneurisma (malformación vascular), con lo que se produce una hemorragia y un hematoma que a su vez comprimen los tejidos nerviosos y pueden llegar a provocar la necrosis y la muerte neuronal.
En estos casos hablamos de Hemorragia cerebral o de Hematoma.
Por otro lado, lo más frecuente es que la causa sea la Obstrucción de un vaso.
Imaginemos el sistema de irrigación del sistema nervioso como un sistema de tuberías por las que circula la sangre y que las de mayor tamaño van desembocando en otras más pequeñas.
Para que ocurra una obstrucción pueden suceder dos cosas: que se forme una placa de ateroma ( a base de material graso y otras sustancias) pegada a la pared interior de un vaso, que va creciendo poco a poco y que, llegado un determinado momento, parte de esa placa se desprenda, se incorpore al torrente sanguíneo y vaya pasando a vasos progresivamente más pequeños hasta llegar a uno lo suficientemente pequeño como para no permitirla pasar con lo que el vaso será obstruido. Como consecuencia de la obstrucción vamos a tener una zona del cerebro sin riego.
Otro mecanismo de taponamiento es que esa placa de ateroma de la que hablábamos antes, vaya creciendo hasta llegar a obstruir el vaso en el que está situada.
En estos dos casos hablamos de trombosis.
El primero suelen ser más leve, porque afecta a un territorio más pequeño.
El segundo afecta a un territorio más amplio y, por tanto, suele ser más grave.
Esto no es general porque la gravedad de la lesión también depende del lugar donde ocurre el evento: tronco cerebral, cerebelo o distintas localizaciones del cerebro.
Las trombosis representan el 85% del total de los Accidentes Cerebro-vasculares
La función del Sistema Nervioso Central es la de enviar impulsos tanto motores (de movimiento), como sensitivos (de sensibilidad), como de la función de los órganos de los sentidos (vista, oído, olfato etc).
Por tanto quién sufre un Ictus o Accidente cerebro-vascular va a tener manifestaciones muy diferentes dependiendo de la zona del sistema nervioso central donde asiente la lesión.
Es decir que quien sufre un Ictus puede presentar los siguientes síntomas:
Pérdida de la visión o alteraciones de todo tipo como visión doble, o disminución del campo visual. Así mismo puede haber alteración de los movimientos oculares.
Se tuerce la boca hacia un lado: es lo que se llama una parálisis facial de origen central.
Se pierde la capacidad de hablar o aparecen diversas alteraciones del lenguaje que se conocen con el nombre de afasias y que pueden ser de diferentes tipos.
Aparece una parálisis total o parcial de extremidades. Generalmente de la media parte del cuerpo que corresponde al hemisferio cerebral contrario a donde se ha producido la lesión. O sea que si el Ictus ocurre en el hemisferio derecho se paraliza el lado izquierdo del cuerpo. Y si ocurre en el hemisferio izquierdo la parálisis es del lado derecho.
Se pierde el control de esfínteres tanto vesical como rectal, dependiendo de la localización de la lesión.
Mareo. Generalmente suele iniciarse el ictus con una pérdida de conocimiento o con sensación de mareo intenso.
Suele acompañarse de dolor de cabeza importante.
Hay una pérdida o alteraciones de la sensibilidad en el mismo lado de la parálisis o paresia
En casos graves, puede haber estupor, coma y muerte del paciente.
Un Ictus o Accidente Cerebro-vascular siempre se trata de una Urgencia Médica.
La actuación rápida implica menos peligro de muerte, síntomas menos graves y menores secuelas para quien lo sufre.
El Tema: Ictus o Accidente Cerebro-Vascular, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Neurología y Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es