Sexualidad
Educación Sexual
El término Educación Sexual incluye al conjunto de actividades relacionadas con la enseñanza, la difusión y la divulgación acerca de la Sexualidad Humana en todas sus etapas. Así como al conocimiento del aparato reproductor masculino y femenino, la orientación sexual, las relaciones sexuales, la reproducción, sexo seguro, planificación familiar, etc. Dirigidas a alcanzar una salud sexual y reproductiva satisfactorias.
Así mismo, consiste en la enseñanza que lleva a desarrollar la comprensión de los aspectos físicos, emocionales, mentales, sociales y económicos de la relación sexual dentro de las relaciones humanas.
Educación Sexual en Niños
La pedagogía sexual se lleva a cabo en el seno de la familia, de forma más o menos consciente.
Ésta se amplía en el círculo de amistades, en el centro escolar y en los medios de comunicación.
El desarrollo normal de un niño se enmarca en la búsqueda por descubrir todo lo que hay y sucede a su alrededor.
De 0 a 1 año:
La sexualidad del niño está íntimamente vinculada a la relación con los padres.
Vive la sexualidad a través de los cuidados y caricias de sus progenitores. Y a través de ellos creará lazos afectivos necesarios para su posterior desarrollo social y sexual.
De 1 a 3 años:
El estrecho vínculo del niño con la familia hace que su pensamiento se vaya ampliando y enriqueciendo.
Comienzan a afianzar su independencia oponiéndose a las reglas que se les imponen, y comienzan a experimentar sensaciones de placer al controlar los esfínteres.
Es la etapa en la que empiezan a conocer su cuerpo.
De 3 a 6 años:
Comienzan a explorar el mundo tanto a nivel físico como social, con lo que refuerzan vínculos con familiares y amigos.
Descubren su sexualidad y tienen su primer enamoramiento, generalmente del progenitor del sexo opuesto.
Aprende a identificar su propio sexo, a relacionarse con los demás y a ensayar sus roles sociales.
Es importante que a esa edad los padres no coaccionen las conductas sexuales del niño.
De 6 a 9 años:
Surge el interés por conocer el mundo y sus fenómenos.
Es fundamental el reconocimiento de las personas de su entorno y cómo afecta esto a la concepción de la propia imagen.
El interés sexual se centra en el conocimiento del cuerpo y de los órganos sexuales.
En esta etapa se inician los juegos sexuales mixtos o entre miembros del mismo sexo.
Los valores sobre la sexualidad de la familia y de la sociedad que los rodea son determinantes para la formación de los valores del niño en esta época de la vida.
Se debe enseñar a los niños que el hecho de que el cuerpo no sea malo ni sucio no permite tener cualquier comportamiento con él.
A través de las preguntas de los niños se puede iniciar su educación en valores, en responsabilidad, en el respeto a uno mismo, a la salud y la integridad propia, así como el respeto y consideración hacia los demás.
Entender la sexualidad ayuda a los niños a manejar sus emociones, a controlar sus vidas y a protegerse contra el abuso sexual. O a prevenir que se conviertan en abusadores sexuales.
El modo más seguro de poner en peligro a un niño es permitir que permanezca ignorante respecto a su sexualidad. O que tenga información inexacta o errónea.
La clave de la protección de un niño es el Conocimiento
Se debe propiciar un clima de apertura en la familia y en el centro escolar. Pero sobre todo en la primera, para que los niños pregunten y expresen sus sentimientos sin trabas. Que sientan confianza para hablar y preguntar sobre cualquier cuestión por la que sientan curiosidad, en la que se incluye la sexualidad.
La educación implica:
Que el desarrollo del niño se efectúe dentro de la normalidad.
Desarrollar su autoestima mediante el reconocimiento y el aplauso de sus habilidades y sus logros.
Se debe empezar a respetar su privacidad y a que ellos se sientan respetados.
Es necesario para aportarles una buena información, usar nombres correctos y concretos para los órganos y los comportamientos sexuales.
Aprovechar los momentos oportunos en los que el niño esté receptivo, para hablar con él de cualquier tema, entre ellos de sexualidad.
Hablarles de manera que puedan entenderlo, de abuso sexual, de orientación sexual y de prostitución.
Hay que enseñarles a respetar las diferencias de personas con distintos valores sobre la sexualidad.
No usar con ellos tácticas de asustar, de amenazas o de miedo.
Dar respuestas honestas, cortas y sencillas.
Preguntar sobre lo que piensan y lo que saben o creen saber.
Que el niño sepa que estás disponible siempre para hablar con él.
Que entiendan que la sexualidad es parte de la vida de cualquier persona y se debe aprender a vivirla con amor y respeto.
El Tema: Educación Sexual en los Niños, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelfono.es