Estrés
Qué es el Estrés
El empleo de la palabra Estrés es anterior a su uso científico.
Dejando a un lado el significado etimológico y el origen de esta palabra, en cuanto a su uso científico se le han aplicado tantos significados que no existe una definición aceptada por todos los estudiosos del tema.
Si hablamos de Estrés nos podemos referir a varios conceptos: trauma psicológico, ansiedad, nerviosismo, conflicto, frustración, etc.
Cuando en 1936 se empezó a hablar de Síndrome General de Adaptación, se llamó estresores a los agentes que desencadenaban ciertas respuestas en el individuo.
Definiciones
En la actualidad la definición de Estrés entra en alguna de las siguientes categorías:
– Definición basada en los estímulos.
Estrés es un estímulo que da lugar en un individuo a una respuesta de tensión, independiente de las acciones o características de la persona.
– Cómo se define en base a la respuesta.
Estrés es la respuesta psicológica o fisiológica que manifiesta una persona ante un agente estresante.
– Definición basada en el concepto estímulo-respuesta.
Se considera el Estrés como la consecuencia de los estímulos ambientales que recibe un individuo y su respuesta personal a tales estímulos.
– Definición basada en la relación individuo-entorno.
Estrés es el resultado de la relación de un sujeto de determinadas características y un entorno que es valorado por aquel como amenazante, porque cree que pone en peligro su bienestar y pone a prueba su capacidad de reacción.
En resumen, se puede definir el Estrés de manera amplia como la respuesta fisiológica y/o psicológica y conductual de una persona que intenta adaptarse y ajustarse a presiones internas y/o externas.
El estresor sería una situación, una persona, un suceso o un objeto que se percibe como amenazante y por tanto conduce a una situación de Estrés.
Características de las situaciones de Estrés
Estas características pueden ser:
Unas exigencias excepcionales del organismo en determinado momento.
La falta de información, porque es inadecuada o insuficiente, para satisfacer esas exigencias.
Puesta en marcha de una activación fisiológica importante.
En consecuencia, un desequilibrio entre las demandas del organismo ante un agente estresor y los recursos de respuesta que posee el individuo.
Se ha de tener en cuenta que los estresores pueden ser agradables o desagradables. Por ejemplo, un ascenso en el trabajo puede ser estresante.
En el Estrés hay que considerar los siguientes elementos:
– Agentes potencialmente estresantes: Como pueden ser una tensión crónica o ciertos acontecimientos vitales puntuales.
– Dotación genética: Para estar predispuesto a una especial vulnerabilidad sobre todo psicológica.
– Malas experiencias pasadas: Que pueden ser experiencias tempranas o vividas durante la etapa de adquisición de habilidades.
– Defensas psicosociales: Fallo en los mecanismos psicológicos de defensa, de la defensa perceptiva o por falta de apoyo social.
– Predisposición a manifestar una reacción fisiológica excesiva: Mediante una activación neuroendocrina o inmunológica.
– Falta de aprendizaje de estrategias adecuadas de conducta: Que pueden ser malas conductas de adaptación, sustitutivas, o conductas malsanas.
Cómo actúa el Estrés sobre la Salud
Las reacciones al Estrés pueden ser:
– Efectos físiológicos. Se elevan las catecolaminas con lo que aparece un aumento de la presión arterial, contracturas musculares y alteración del ritmo cardiaco y respiratorio.
– Estrategias inadecuadas de protección y defensa. Como puede ser una reacción, para superar las dificultades, de aislamiento y evitación.
– Desorganización funcional. Que se traduce en conductas estereotipadas y menor rendimiento personal.
– Comportamientos expresivos de ansiedad, cólera o nerviosismo.
– Otros efectos a largo plazo. Que pueden ser tanto sensibilidad por habituación como frecuentes crisis de Estrés con repercusión en la salud.
Cómo percibimos el Estrés
El Estrés es algo subjetivo y personal. En momentos diferentes reaccionamos y percibimos los sucesos de forma distinta, según nuestro estado físico y anímico. Se reconocen dos fases:
Una fase positiva del Estrés en la que la reacción del individuo es de optimismo, entusiasmo, lucidez mental, vitalidad, resistencia a la enfermedad, creatividad, etc.
En cambio, en la fase negativa del Estrés vamos a tener irritabilidad, depresión, pesimismo, baja productividad, fatiga, falta de concentración.
La magnitud del Estrés depende tanto de la intensidad y frecuencia del cambio ocurrido como de la capacidad de adaptación de cada individuo.
En el Estrés crónico sólo persiste la fase negativa, con sus manifestaciones que cada vez van a ser más acentuadas hasta poner en peligro la salud física y mental de quien lo sufre.
El Tema: Estrés. Qué es el Estrés, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna y Neurología, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es