Delirio y Confusión
El Delirio es un estado mental que implica alteraciones en la atención, la conciencia, la memoria, el pensamiento, las emociones, en el control de movimientos y en el sueño-vigilia.
La Confusión es una disminución del estado de conciencia de un individuo que le impide pensar de manera clara, orientarse correctamente, prestar atención a lo que ocurre a su alrededor o razonar de manera ordenada.
Se considera que la Confusión está siempre presente en el Delirio, pero NO siempre en la Confusión está presente el Delirio.
Hay autores que consideran que Confusión y Delirio son patologías iguales o que, en grado avanzado, la Confusión va a dar lugar al Delirio.
Estados confusionales agudos se producen en alrededor de un 10% del total de los pacientes hospitalizados y en el 30-50% de los pacientes ancianos hospitalizados. Los más vulnerables son los pacientes que tienen una demencia, y son más vulnerables a mayor grado de demencia.
Causas de Confusión o Delirio
Todas aquellas que producen alteraciones en los hemisferios cerebrales, y pueden ser:
– Causas neurológicas. En estos casos la Confusión o el Delirio se acompañan de signos y síntomas neurológicos (hemiplejía, crisis epiléptica, rigidez de nuca…etc.).
Pueden deberse a:
Traumatismos craneales (conmoción, hematoma subdural…)
Problemas vasculares (Infartos o embolias cerebrales, encefalopatía hipertensiva)
Tumores (Metástasis en cerebro, síndrome paraneoplásico…)
Infecciones (Meningitis, encefalitis abscesos)
Procesos inflamatorios (encefalomielitis)
Epilepsia.
– Causas sistémicas o generales. En estos casos no es frecuente que aparezcan signos y síntomas neurológicos acompañantes, y pueden ser por las siguientes patologías:
Problemas metabólicos tales como coma diabético, hipoglucemia, insuficiencia renal o hepática, enfermedades metabólicas hereditarias.
Trastornos endocrinológicos. Los más frecuentes son Patología tiroidea, paratiroidea o suprarrenal.
Alteración de la temperatura, que pueden ser Hipotermia, golpe de calor o fiebre elevada.
Causas tóxicas. Generalmente ntoxicación por fármacos, drogas y alcohol, síndrome de abstinencia, toxinas químicas.
Por déficit de algunas vitaminas como Vitamina B12, ácido nicotínico, tiamina…
Debido a infecciones generales como pueden ser Endocarditis, neumonías, paludismo, septicemia.
Por trastornos hematológicos, sobre todo en Anemias graves.
– Causas psiquiátricas. Suele aparecer Confusión y Delirio en:
Manía aguda.
Esquizofrenia.
Histeria.
Depresión y/o ansiedad extrema.
Manifestaciones de Confusión y Delirio
En primer lugar aparece una alteración de la consciencia con disminución del estado de alerta y de la atención.
La alteración del nivel de atención oscila en la Confusión desde una apatía leve a no poder captar detalles complejos, no poder establecer interacción con otras personas o a descuidar las necesidades corporales.
En cambio en el Delirio suele haber reacciones excesivas a cualquier estímulo, distracción e incapacidad para concentrarse.
En este último aparece un deterioro de la memoria con escasa memoria reciente y disminución de los recuerdos lejanos. Además hay desorientación, primero en el tiempo y luego en el espacio.
El razonamiento está desorganizado y dislocado, el pensamiento es lento, el lenguaje incoherente y puede cometer errores al nombrar objetos.
Son frecuentes las alucinaciones y los trastornos de las emociones, que se pueden traducir igual en embotamiento afectivo que en labilidad emocional o agitación y miedo.
La hiperactividad del sistema nervioso autónomo puede estar presente manifestándose con ansiedad, taquicardia y disnea emocional.
Así mismo son frecuentes las alteraciones psicomotrices, o bien con disminución de actividad motora, o con hiperactividad, inquietud, movimientos repetitivos, o incluso mioclonias.
Si se trata de un episodio agudo, cuando el paciente se recupera, suele quedar con amnesia del episodio confusional o delirante (no lo recuerda).
Diagnóstico
Se ha de buscar la causa de la Confusión o Delirio mediante historia clínica, exploración del paciente, pruebas de laboratorio y pruebas de imagen.
Tratamiento
Se tratan los síntomas. Por ejemplo, sedación si está agitado.
Pero ante todo hay que hacer tratamiento de la causa.
El Tema: Delirio y Confusión, ha sido revisado, elaborado y resumido, por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Neurología y Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es