Sexualidad
Historia de la Sexualidad
Otras Culturas
La religión Judía
En el Antiguo Testamento ya se señalaba que el matrimonio tiene como única finalidad la procreación y tener descendencia.
La mujer tiene el privilegio de compartir al marido con otras concubinas. Si ella es infiel, era apedreada hasta la muerte.
La cultura y religión judias consideraba a las mujeres como objetos sexuales.
Fue la primera religión que reprimió la Sexualidad y elaboró prohibiciones estrictas respecto al sexo.
También prohibe el adulterio a los hombres, la homosexualidad y el incesto (Levítico).
En cambio, en el Cantar de los Cantares de Salomón (tuvo 700 esposas y 300 concubinas) la Sexualidad se contempla como algo poético, placentero y creativo.
En general cuando surge la familia patriarcal, en cualquier cultura se reprime la Sexualidad de la mujer y se exigen una serie de normas a la esposa, sobre todo fidelidad, para que el hombre pueda estar seguro de quiénes son sus hijos.
Por otra parte, en sociedades donde a la mujer no se le da valor alguno, el hecho de que un hombre se casara con ella la «revalorizaba» socialmente.
Islamismo
Es una religión que reprimió ferozmente en materia sexual a las mujeres desde sus inicios, práctica que continúa con mayor o menor intensidad hasta nuestros días.
India
Se conoce la importancia que daban a la actividad sexual como método para obtener placer porque escribieron libros sobre erotismo, como el conocido Kama-Sutra.
Este libro alecciona sobre Sexualidad y convierte el pleno goce sexual en una experiencia casi mística. Pero que parece que sólo estaba permitida en las clases altas.
En el pueblo (castas bajas) no se admitía este desarrollo creativo de la Sexualidad y menos entre las mujeres.
Fue una sociedad machista con costumbres seriamente represivas contra las mujeres que también han perdurado en el tiempo.
Japón
Se sabe que la homosexualidad era apreciada y practicada con normalidad en la antigua cultura japonesa.
Las Geishas eran profesionales del entretenimiento y originariamente eran hombres.
Las cortesanas en cambio daban entretenimiento sexual.
Desde antiguo existía la monogamia, pero la sociedad era machista con lo que en el reparto, la represión era para la mujer y los privilegios para el hombre.