Mente Sana en un Cuerpo Sano
Una vida mental sana favorece a todo el organismo.
También hay que tener en cuenta lo contrario, unos buenos cuidados físicos retrasan el deterioro mental.
A continuación se mencionan una serie de pautas para proteger mente-cuerpo, cuerpo-mente.
Alimentación
Huye de las grasas saturadas abundantes en la bollería industrial y mantén a raya el colesterol malo.
Toma al menos un vaso de leche al día, si es necesario descremada.
Haz una dieta baja en calorías, salvo que tu médico te prescriba otra.
Ojo con el azúcar. Viven menos las personas con diabetes, con intolerancia a la insulina, con colesterol elevado y con obesidad, y su calidad de vida es peor.
La dieta mediterránea parece que reduce la mortalidad un 10%.
Frutos secos. Siete raciones a la semana pueden reducir el riesgo de cáncer y de enfermedades cardiovasculares. Las nueces parece que frenan el envejecimiento del cerebro.
Los polifenoles, que abundan en los frutos secos, cereales, legumbres, frutas y verduras, son potentes antioxidantes.
No te saltes un desayuno sano. Es la comida más importante del día.
Consume fruta en general. La manzana tiene un efecto antiedad. La granada es un buen antioxidante.
Toma verduras, zanahorias, judías verdes, brócoli, berza y espinacas. Tienen alto contenido en alfa-caroteno que es un potente antioxidante.
Reduce la cantidad de carnes rojas y procesadas (salchichas, salami, chuletas de cerdo y buey. y consume más carnes blancas (pollo, pavo, avestruz, conejo, capones, pulardas, pichones,…)
El café ha demostrado que tiene propiedades que evitan enfermedades cardiovasculares.
Toma una copa de vino tinto al día.
Si tomas pan, que sea integral. Es igual que sea de trigo, centeno o avena. Parece que disminuye un 20% el riesgo de cáncer de colon.
Enriquece las ensaladas con un buen chorro de aceite de oliva virgen.
Los arándanos son buenos vasodilatadores y previenen la cistitis.
Toma más pescado azul, es una fuente segura de omega-3.
Toma té verde, parece que proporciona mejor movilidad articular, y té blanco que retrasa la formación de arrugas.
Consume pipas de girasol y calabaza de forma moderada (20 gr diarios). Tienen un alto contenido en magnesio.
Puedes consumir 100 gr. diarios de chocolate con al menos un 70% de cacao. Es energético y disminuye el riesgo cardiovascular.
Ejercicio
Realizar ejercicio a diario aumenta el número de mitocondrias que suministran energía a las células, tanto a los músculos como a las neuronas.
Cada cual ha de realizar el ejercicio adecuado a su edad, a sus gustos y a sus circunstancias personales.
En personas mayores de sesenta años son beneficiosos:
Kárate. Aumenta la fuerza muscular y la precisión de movimientos, y mejora la coordinación muscular.
Taichí. Mejora coordinación y visión periférica.
Pilates. Mejora la movilidad articular, respiración y oxigenación, fuerza, equilibrio y coordinación de movimientos.
Caminar. Mantiene agilidad de los movimientos.
Yoga.
Actividad moderada cinco veces por semana y tres días deporte intenso y durante al menos cuarenta minutos.
No se recomienda correr maratones a partir de los sesenta años de edad (parece que se acumula más calcio en las arterias).
Procura evitar
La delgadez extrema. Un ligero sobrepeso tiene mejor pronóstico que una gran delgadez.
El desempleo, porque genera estrés y menor esperanza de vida.
El aislamiento social.
La hipertensión.
No seas un viejo gruñón, procura ser positivo.
La Depresión es un factor de riesgo.
No tengas un pensamiento disperso. Las personas más divagantes e indecisas envejecen más rápidamente.
Cosas beneficiosas para la Mente y el Cuerpo
Optimismo con moderación, con los pies en el suelo.
Haz revisiones médica periódicas.
A mayor nivel de estudios y formación parece que se envejece más lentamente.
Meditación y relajación.
Practicar música o tocar un instrumento mejora la capacidad cognitiva.
Se un eterno aprendiz. Adquirir alguna nueva habilidad estimula el cerebro y la memoria.
Rodéate de amigos, aumenta tus lazos sociales. Las personas solitarias viven menos.
Siempre que puedas respira aire puro.
Practica sexo satisfactorio. A los mayores de 65 años se les recomienda al menos tres veces al mes.
No fumes. El tabaquismo reduce en una década la esperanza de vida. También afecta el tabaquismo pasivo.
No pases sentado en el sofá más de tres horas diarias.
Conocer más de un idioma retrasa el Alzheimer.
Practica un ocio productivo: leer, hacer crucigramas, ir al cine, teatro o conciertos, navega por Internet. Todo ello retrasa el deterioro cerebral.
Duerme el tiempo adecuado. Todos los esfuerzos por mantenerse sano se pueden anular por dormir mal.
Utiliza protección solar para retrasar el envejecimiento de la piel.
Intenta ser feliz y vivir satisfecho.
Duerme la siesta. Una siesta de 45 minutos aleja los problemas cardiovasculares.
El apoyo moral que se puede aportar tanto en casa como en el trabajo disminuye el estrés y la mala salud.
Las personas que practican actividades de voluntariado viven más tiempo y con mayor calidad de vida.
Viven más las personas que habitan en zonas altas que aquellas que viven a nivel del mar.
Sigue un horario ordenado, tu reloj biológico te agradecerá que hagas actividades a la misma hora.
Realiza las actividades cotidianas. Hacer las labores de casa o cuidar el jardín también es hacer ejercicio.
Tener una mascota al llegar a la tercera edad produce efectos positivos sobre la salud.
El Tema: Mente Sana en un Cuerpo Sano, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna y Neurología, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es