Espondilitis Anquilosante
Diagnóstico de Espondilitis Anquilosante
El diagnóstico se realiza mediante:
Historia Clínica. Exploración. Radiografía de columna y pelvis.
Analítica general. En ésta puede aparecer:
Anemia leve.
La velocidad de sedimentación puede estar elevada o no estarlo.
El factor reumatoide es negativo, lo que ayuda a diferenciar esta enfermedad de la Artritis Reumatoide.
El examen de antígeno HLA-B27 es positivo.
Resonancia magnética de Columna y Pelvis.
Evolución
En general Evoluciona en Brotes o ataques.
Entre brote y brote el paciente puede permanecer sin síntomas y hacer vida normal, aunque también puede ocurrir que tras cada brote el paciente vaya quedando más afectado.
La Espondilitis Anquilosante condiciona la calidad de vida de quienes la padecen.
La limitación de la movilidad es una de las características más destacables de la enfermedad.
La evolución es diferente en cada persona.
A veces hay una remisión completa de la enfermedad.
Generalmente el paso del tiempo juega a favor del paciente porque los ataques se van espaciando y son cada vez más leves.
Ya no es frecuente ver formas de la enfermedad en las que se sueldan todas las vértebras, porque el diagnóstico se suele hacer pronto y se comienza de inmediato con el tratamiento.
Estos pacientes pueden llevar una vida laboral activa en trabajos que permitan variedad de movimientos.
En trabajos sedentarios se recomienda al paciente levantarse y pasear cada cierto tiempo.
No son recomendables los trabajos que impliquen sobrecarga en la columna vertebral.
El embarazo en mujeres con Espondilitis Anquilosante no supone riesgo para la madre ni para el feto.
Si hay afectación de las caderas está indicada cesárea en el momento del parto.
Hay que vigilar la toma de medicamentos que puedan ser dañinos para el feto.
Tratamiento
En el Tratamiento de esta enfermedad juega un papel muy importante la gimnasia y la fisioterapia.
El Tratamiento Farmacológico se realiza con:
Corticoides Sulfosalazina. Metotraxato.
Los Tratamiento biológicos son empleados desde el año 2003 (etanercept, edalimumab, infliximab, golumumab).
Antiinflamatorios no esteroideos.
Existen estudios que mencionan tratamientos con pamidronato, talidomida o isótopo radiactivo Radio224.
En casos avanzados se puede hacer tratamiento quirúrgico.
La Fisioterapia Y Gimnasia van dirigidos a conservar la normalidad articular y evitar deformaciones de la columna.
Aunque el ejercicio en ocasiones puede resultar doloroso para el paciente, se debe insistir en él.
Son recomendables ejercicios de extensión como Yoga o Pilates.
El Tema: Espondilitis Anquilosante. Diagnóstico, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es