Atrofia Vaginal
Diagnóstico de la Atrofia Vaginal
Se realiza mediante la historia clínica donde la paciente refiere síntomas ya descritos en la anterior publicación.
En la Exploración ginecológica se comprueba que la mujer tiene:
El Vello púbico muy escaso con poca elasticidad de las paredes vaginales.
Turgencia disminuida de la piel de la vulva y reabsorción de los labios menores que parecen más pequeños.
Se produce un sangrado vaginal al introducir el espéculo para realizar la exploración.
Otros estudios a realizar en caso de Atrofia Vaginal son:
Medir el pH vaginal y valorar el Índice de maduración de las células del epitelio vaginal.
Examen microscópico de una pieza de biopsia.
Realizar citología cervical para descartar la existencia de células malignas.
Cuantificación de los niveles hormonales en sangre.
Ecografía ginecológica completa.
Diagnóstico Diferencial
Para hacer el diagnóstico de Vaginitis Atrófica primero hay que descartar algunas de las siguientes patologías con las que se podría confundir:
Infecciones vaginales de cualquier origen, bacterianas, víricas, por hongos o enfermedades de transmisión sexual.
Reacciones alérgicas.
Líquen plano o líquen escleroso.
Úlceras o fisuras que aparezcan en el tracto vaginal.
Hemorragias genitales de cualquier etiología.
Cistitis o cánceres urogenitales en general.
Tratamiento de la Atrofia Vaginal
Hay una serie de medidas que se pueden utilizar para aliviar los síntomas desagradables de la Atrofia Vaginal, tales como:
En primer lugar se deben utilizan lubricantes vaginales.
Se pueden usar de manera habitual y continua o en el momento de las relaciones sexuales.
Se ha de tener en cuanta que son útiles pero únicamente en aquellas mujeres que solo tienen síntomas leves.
Medidas mecánicas:
La actividad sexual ha de ser muy cuidadosa y, si es necesario, se puede hacer uso de dilatadores vaginales.
Estrógenos vaginales. Son de uso preferente los preparados de uso local por las siguientes razones:
Ayudan a restaurar el pH vaginal, aumentan el grosor del epitelio de la pared vaginal y aumentan la secreción vaginal.
Controlan de manera eficiente las infecciones urinarias y los síntomas de vejiga hiperactiva.
La mejoría comienza a observarse a las 3-6 semanas de iniciar el tratamiento en el 80-90% de las mujeres y se puede mantener el tratamiento a largo plazo siempre que se compruebe que sigue habiendo beneficios.
El Tema: Atrofia Vaginal, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es