Encefalopatía Hepática
Se trata de un síndrome neurológico complejo producido por una alteración hepática grave. En él van a aparecer trastornos de la conducta y de la personalidad, manifestaciones neurológicas diversas, alteraciones de la conciencia que pueden llegar a un coma irreversible y características alteraciones en el electroencefalograma.
Se relaciona con la acumulación de sustancias tóxicas en el intestino, que no pueden ser purificadas por el hígado. Sobre todo, amoniaco y otros compuestos nitrogenados.
Factores desencadenantes de Encefalopatía Hepática
Hay varios factores que pueden actuar sobre un hígado ya enfermo para que se produzca una encefalopatía.
Estos factores suelen ser:
Medicamentos, tales como Opiáceos, Tranquilizantes. Sedantes y Diuréticos.
Sobrecarga de Nitrógeno, provocada por: Hemorragia intestinal. Estreñimiento grave o por exceso de proteínas en la alimentación.
Desequilibrio electrolítico producido por: Hipopotasemia, Disminución del volumen de sangre circulante (hipovolemia) o Disminución del oxígeno o alcalosis.
Otros factores pueden ser: Enfermedades hepáticas sobreañadidas, Infecciones, o Intervenciones quirúrgicas.
Síntomas de Encefalopatía Hepática
Esta Encefalopatía se presenta de dos formas: aguda y reversible, o crónica y progresiva.
En el primer caso se implanta de forma brusca y el paciente puede volver a la normalidad anterior, una vez es tratado de forma adecuada.
Cuando la forma es crónica y progresiva, los síntomas neurológicos y el deterioro mental se van estableciendo poco a poco.
En ambos casos aparecen manifestaciones neurológicas tales como:
Déficits focales. Es típico el aleteo hepático o temblor aleteante.
Trastornos de la atención que pueden avanzar hacia alteración de la memoria, confusión, estupor y coma.
Combinaciones alternantes de temblor, rigidez, hiperreflexia y a veces convulsiones.
Alteraciones en el electroencefalograma.
Olor característico de aliento y orina.
Según la intensidad de la manifestación de los síntomas, se establecen cuatro grados de la enfermedad para interpretar la fase de evolución de menor a mayor gravedad.
A veces, esta hepatopatía se puede confundir con alcoholismo agudo con patologías como: intoxicación por sedantes, hematoma subdural y otras encefalopatías metabólicas.
Tratamiento
Está orientado a:
-Tratar los factores desencadenantes mediante la eliminación de sustancias tóxicas.
– Disminución del amoniaco y otras toxinas de la sangre.
– Eliminar proteínas de la dieta.
– Evitar el estreñimiento.
La absorción del amoniaco se disminuye con administración de lactulosa o de neomicina.
En cualquier caso hay que tratar manifestaciones tales como edema cerebral o cualquiera otra que se presente en el curso de la enfermedad.
El Tema: Encefalopatía Hepática, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna y Neurología, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es