Citomegalovirus (CMV)
Infección por Citomegalovirus
El Citamegalovirus pertenece al grupo de los virus del herpes y es un patógeno importante que causa infecciones en todos los grupos de edad, además de provocar defectos congénitos graves.
El Citomegalovirus está distribuido por todo el mundo.
El hacinamiento y la higiene escasa favorecen su propagación.
Son frecuentes las infecciones en los niños recién nacidos y durante la primera infancia.
El virus puede encontrarse en saliva, leche, heces y orina.
Se contagia por contacto repetido y prolongado, como, por ejemplo en niños que conviven en guarderías.
Al final de la adolescencia y en adultos puede trasmitirse por vía sexual.
Una vez infectado el individuo probablemente sea portador del virus durante toda su vida.
La infección congénita por Citomegalovirus en el feto, puede ser principalmente una consecuencia de que la madre sufre una infección primaria, o bien una reactivación de alguna infección anterior.
Síntomas de infección por Citomegalovirus
– Infección congénita
Puede ser leve y asintomática o una infección con síntomas muy graves.
En recién nacidos suelen aparecer como síntomas microcefalia, petequias, hígado y bazo grandes o ictericia.
En fase intrauterina puede producirse retraso en el desarrollo y el crecimiento del feto.
El pronóstico en lactantes con lesiones graves es malo (20-30% de mortalidad). De los que sobreviven, muchos presentan posteriormente sordera y deterioro intelectual.
La mayor parte de los niños con infección congénita por CMV no tienen síntomas al nacer, pero alrededor de un 10-25% desarrollan en años posteriores alteraciones psicomotoras, auditivas u oculares, importantes.
– Infección perinatal
El recién nacido puede contagiarse con CMV en el canal del parto, en el momento del nacimiento, si la madre está infectada. Pero la infección también puede adquirirla a través de la leche materna o por el contacto posnatal con la madre.
La mayor parte de los recién nacidos infectados no tienen síntomas salvo los prematuros que pueden presentar una neumonía intersticial característica
Los síntomas, si los hay, serán, retraso en el crecimiento, anemia, erupciones en piel, o hepatitis.
– Infecciones por CMV en pacientes inmunodeprimidos
Generalmente aparece esta infección en personas trasplantadas, en quienes padecen sida y en pacientes con tratamiento con fármacos inmunosupresores.
Puede manifestarse con: fiebre, leucopenia, hepatitis, neumonía, afectación digestiva, retinitis o meningoencefalitis.
– Mononucleosis por CMV
Es un cuadro infeccioso que aparece tras el periodo neonatal con síntomas tales como fiebre, mialgias, malestar, cefalea, aumento del tamaño del bazo. Es raro encontrar ganglios inflamados en los pacientes.
La mayoría de las personas afectadas se recuperan sin secuelas aunque la astenia posviral puede durar varios meses.
En cualquiera de los casos el diagnóstico se va a realizar por aislamiento del virus.
Tratamiento y Profilaxis
Además de medidas generales se utilizan para el tratamiento inmunoglobulina específica contra el CMV o fármacos antiretrovirales.
La profilaxis se ha de tener en cuenta en pacientes a los que se les realiza transfusiones de sangre y en personas sometidas a trasplante de órganos. Y consiste en tomar medidas específicas en cada caso.
El Tema: Citomegalovirus (CMV). Infección por Citomegalovirus, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra María Julia Romero Martín. Especialista en Medicina Interna y Neurología, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es