Hipófisis
Alteraciones de la Hipófisis
Existen diversas patologías de la glándula Hipófisis; desde trastornos genéticos a alteraciones de todo tipo. Se describen algunas a continuación:
1) Anomalías en el desarrollo de la Hipófisis
También son variadas y pueden ser debidas a:
Defecto en el desarrollo total de la Hipófisis o hipoplasia de Hipófisis. Sucede cuando existe una falta total de desarrollo del cerebro o de algunas zonas cerebrales.
Agenesia o ausencia de la Hipófisis. Los neonatos con este problema sobreviven solo unas horas.
Síndrome de la silla turca vacía. Aparece en este síndrome una Hipófis delgada, plana y desplazada, pero que en ocasiones puede funcionar bien.
Aparición de tejido hipofisario ectópico, o en lugares que no le corresponde. Es un problema muy raro. Si aparece, suele ser en ovario, cavidad nasal y en el seno esfenoidal.
En algunos síndromes clínicos específicos, como el síndrome de Louis Bar o en la Ataxia-Telangectasia, pueden existir trastornos del desarrollo de la glándula Hipófisis.
2) Trastornos vasulares de la Hipófisis
El síndrome de Sheehan es una necrosis de la Hipófisis que ocurre tras el parto, en mujeres que han sufrido grandes hemorragias durante el mismo.
3)Alteraciones de la Hipófisis en desórdenes metabólicos.
Tales como:
Amiloidosis. En la amiloidosis sistémica puede haber depósito de amiloide en la glándula hipofisaria. En el síndrome amiloide senil, que está en relación con la edad, también puede funcionar mal la glándula, porque aparecen en ella depósitos de amiloide.
Sobrecarga de hierro en la Hipófisis, que puede suceder en la hemocromatosis idiopática, en transfusiones sanguíneas múltiples y en pacientes que toman de forma continuada suplementos de hierro.
4) Lesiones genéticas de la glándula Hipófisis.
Las lesiones genéticas pueden aparecer en cualquier zona de la Hipófisis.
La mayoría no dan alteraciones del funcionamiento de la glándula, salvo que alcancen un tamaño considerable.
Los quistes son las lesiones más frecuentes y pueden ser de varios tipos:
– Quiste de Rathke. El contenido del quiste puede variar desde claro y transparente a micoideo y grumoso.
Los síntomas más frecuentes son trastornos visuales y mal funcionamiento general de la Hipófisis (pan-hipopituitarismo).
Para que aparezcan síntomas, el tamaño del quiste debe ser superior a 1 cm.
– Quiste epidermoide. También puede aparecer en cualquier lugar de la Hipófisis y se puede confundir con el anterior.
Los síntomas también van a depender del tamaño que llegue a alcanzar.
– Quiste dermoide. Son muy raros en la glándula Hipófisis.
Se forma a base de restos cutáneos.
Al igual que los anteriores, la presencia o no de sintomatología dependerá del tamaño.
El Tema: Hipófisis. Alteraciones de la Hipófisis, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Rmero Martín, Especialista en Medicina Interna y Neurología, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es