Parotiditis
Diagnóstico de la Parotiditis
Las Paperas se diagnostican «a simple vista» y por los síntomas que las acompañan.
En ocasiones hay que identificar al virus en laboratorio mediante técnicas de detección directas, porque la determinación de Ig M específica no es valorable en las personas que han sido vacunadas.
Tratamiento de la Parotiditis
No existe un tratamiento para curar la enfermedad, por tanto, se hace u tratamiento sintomático dirigido a aliviar los síntomas presentes.
Las medidas fundamentales a tomar son:
Aislar relativamente al enfermo para que no contagie a otras personas que no hayan padecido previamente la enfermedad.
Es conveniente hacer reposo mientras la fiebre esté presente.
En cuanto a fármacos se utilizan Antitérmicos para reducir la fiebre.
Antiinflamatorios, siempre que estén indicados, por su efecto antitérmico y analgésico.
No dar aspirina a los niños por el riesgo que tiene este medicamento de producir un Síndrome de Reye que en ocasiones puede resultar mortal.
Requieren cuidados especiales y específicos aquellos pacientes en los que surjan complicaciones.
Pronóstico de la Parotiditis.
La enfermedad suele durar alrededor de unos dos semanas hasta la completa recuperación del paciente.
Ocasionalmente esta infección puede causar infertilidad en varones en quienes la Parotiditis se haya complicado con orquitis, es decir una afectación testicular.
En mujeres embarazadas puede producir aborto.
Complicaciones de la Parotiditis
Como la mayoría de la población infantil está vacunada contra esta enfermedad, si alguien casualmente la padece es muy raro que se presenten complicaciones importantes.
En personas no vacunadas, si tiene una Parotiditis, las complicaciones que aparecen con más frecuencia son:
Inflamación de otras glándulas salivales.
Pancreatitis o inflamación del páncreas. Se trata de una complicación que reviste gravedad importante
Orquitis o inflamación testicular que puede dar lugar a infertilidad.
Meningitis que también es un cuadro grave.
Sordera crónica. Aparecían con relativa frecuencia en la época que no se vacunaba a los niños, como complicación definitiva
Profilaxis
La vacuna triple vírica protege contra sarampión, parotiditis y rubéola.
Se suele aplicar una dosis a niños entre 12 y 15 meses de edad.
La vacuna se repite a los 4-5 años o entre los 11 y 12 si no se había aplicado antes, o según el calendario vacunal vigente en cada zona.
El Tema: Parotiditis. Tratamiento, ha sido revisado, elaborado y resumido por la Dra. María Julia Romero Martín, Especialista en Medicina Interna, para publicar en: www.tumedicoaltelefono.es